¿Soterrar o Integrar?

Hoy aparece en El Diario de León un reportaje sobre el Plan de Integración de FEVE en la ciudad de León. En el se detallan algunas de las actuaciones como la remodelación de la Plaza Juan de Austria, la construcción de una rotonda en Álvaro López Núñez para desviar el tráfico por Ramón y Cajal y la remodelación del entorno de la estación de FEVE. El precio oscilaría entre los 88,5 millones del soterramiento y los 36,2 millones que costaría la integración, convirtiendo a las vías de FEVE a partir de la Asunción en parte del tranvía de la ciudad.

Proyecto de integración/soterramiento del ferrocarril de FEVE. Autor: eipoklen, Fuente: Diario de León, click para ampliar.

El problema de la integración sería la pérdida total de los beneficios que acarrearía un soterramiento integral para los barrios afectados, que perderían la posibilidad de contar con un gran eje peatonal que actuase como revitalizador de estos barrios. Otro problema, común a ambos proyectos, sería la creación de una rotonda en Álvaro López Núñez para conectar esta avenida con la calle Ramón y Cajal; algo que acarrearía que un gran número de coches utilizasen una vía que trascurre en paralelo a uno de los legados monumentales más importantes de la ciudad, obviando que con una peatonalización de la zona hasta la calle Renueva se podría recuperar este activo y enseñarlo a los visitantes que acuden a la capital del viejo reino.

La estación de FEVE. Fuente: Wikimedia.es, click para ampliar.

El entorno de la estación también esta mal planteado. No se piensa a lo grande o con ambición. De este modo, el solar de la estación, de 30.000 metros cuadrados, acogería según el plan, unas 152 viviendas, un parque y un aparcamiento subterráneo de 150 plazas. Todo ello es a todas luces insuficiente para las necesidades de una ciudad que debe aspirar poco a poco a liderar el desarrollo del cuadrante noroeste. Lo correcto sería deshechar la idea de las viviendas y del parque y apostar por algo más ambicioso que suponga un antes y un después en la vida del barrio. Lo correcto para mí y que ya ha pensado un experto del tema sería apostar por la creación de un hotel de 12 a 14 plantas de arquitectura vanguardista que supusiese un nuevo icono para la ciudad; su situación sería envidiable, en pleno centro de la ciudad, a un paso de San Isidoro y el casco antiguo, Santo Domingo, San Marcos y todo Eras de Renueva, además de que sería el punto de partida de trenes como el Transcantábrico, el tren ciudad de León o el futuro Hullero. Dicha situación aseguraría el éxito total de dicho hotel, cuya posesión se disputarían con toda seguridad firmas de renombre.

Los trenes de FEVE esperando en la estación de Matallana. Fuente: Wikimedia.com, click para ampliar.

El parque debería ser desechado para construir en su lugar una nueva plaza donde los residentes de la zona pudiesen pasear y admirar la zona. El parking, en vez de tener 150 plazas, debería contar con no menos de 1.500, para suponer un desahogo a la zona, que podría prescindir fácilmente de las plazas ORA de Padre Isla que se perderán con el tranvía. Los almacenes y la estación, bien podrían dedicarse a un museo del ferrocarril de vía estrecha, construyendo para recibir a los trenes una estación subterránea que permitiese la entrada de trenes de vía estrecha y tranvías, además de dársenas para el autobús que permitiesen una total intermodalidad del transporte urbano. No hay que decir que todas estas medidas supondrían unos ingresos muy importantes a las arcas de FEVE, que bien podría emplear para deshechar la idea de la integración y apostar sin fisuras por el soterramiento total hasta la Asunción. Depende ahora de FEVE y del Ayuntamiento que León pierda o aproveche esta oportunidad.