Opinión: León y Burgos contra Castilla y León

No soy muy amigo de verter opiniones políticas en este blog, que esta para informar en cuanto pueda a la gente que me lea de los proyectos de la capital del viejo reino y de la provincia leonesa. No obstante, no puedo por más que rendirme a las evidencias y comentar algo que ya empieza a ser un tema de conversación en auge en esta nuestra tierra y en la vecina Burgos. Bien, de todos es sabido que debido a la fusión de cajas, en Burgos ha despertado un sentimiento regionalista basado en exactamente lo mismo que los leoneses llevamos reivindicando durante 25 largos años... no más manipulaciones por parte de la clase dirigente vallisoletana, que gobierna Castilla y León desde que surgió, que maneja la comunidad a su antojo y al servicio de los intereses de Valladolid.

Este nuevo sentimiento regionalista esta siendo recogido por un nuevo partido, surgido poco antes de las elecciones del 2007 que se denomina Ciudadanos de Burgos por Castilla la Vieja (CiBU). Bien, analizando más pormenorizadamente el tema, vemos que a partir de este momento, León, con sus 500.000 habitantes (apenas un 20% del total de la comunidad), ya no estará solo y se le unirá Burgos con sus 380.000 habitantes, con lo que el total se acerca ya a los 880.000 habitantes, una fuerza demográfica más que suficiente para derribar de una vez por todas el más que asfixiante centralismo de la Junta de Castilla y León. Los pasos a seguir son bien claros; que la UPL mantenga o aumente su representación en las Cortes gracias al aumento de un escaño de la provincia en las cortes -por aumento de población- y que CiBU logre una representación aceptable que permita a las fuerzas regionalistas hacer presión. La circunstancia que se da es que el PP tiene que sucumbir al desgaste y perder un total de siete escaños para que la mayoría absoluta se pierda. Esto se podría lograr en unas elecciones donde el PSOE recuperase fuerza ante el nuevo candidato que quiere reforzar el partido -el candidato para León, todo sea dicho, es pésimo, pues desde su atalaya segoviana, ve Castilla, pero no alcanza a ver León- y podría calar en Castilla y recuperar fuerza electoral que les permitiese recortar en mucho la distancia con el PP. La coalición PSOE-UPL-CiBU es pues la única solución a los males de nuestra tierra, con la eventual participación, si llegase a lograr representación, del partido salmantino de corte leonesista UPSa. Sino se lograsen en unas elecciones, ya se podría lograr en las siguientes... esto es por lo que ahora se nos abre un escenario completamente nuevo, la cuestión ahora no es si pasará, la cuestión es cuando, pues definitivamente esta claro que ocurrirá.

El sueño del León Solo nunca ha estado tan cerca como lo va a estar en los próximos años, de los leoneses dependerá si queremos seguir adelante o por el contrario, nos echamos atrás, dando carpetazo a la única salida viable para el desarrollo de nuestra tierra. Respecto a esto, los leoneses deberíamos tener claro si recuperamos nuestra región o por el contrario, nos desentendemos de Zamora y Salamanca y afianzamos una provincia de León convertida en la decimo octava autonomía. En mi opinión, León debería ser ambicioso y apostar por la recuperación de sus valores, creando un nuevo ente, que en principio debería estar inscrito en la comunidad autonóma de Castilla y León para acelerar el proceso, que controlase las tres provincias, con sede en León, Zamora o Salamanca y que fuese rápidamente recogiendo las competencias de la Junta en estos tres territorios, empezando por Fomento, Hacienda, Sanidad, Educación y Administraciones Públicas.

Sin más, pido disculpas a los que leen este blog solamente por los proyectos y espero que a los que les guste la temática hayan encontrado placentera la lectura de estos párrafos y les hayan reafirmado en que no hay que tirar la toalla; León puede ser una autonomía y se puede conseguir atacando desde dentro al ente castellano y leonés.