Cuando la previsión billa por su ausencia.

Según publicaba ayer el periódico El Mundo en su edición para la provincia leonesa; un estudio independiente encargado por la Cámara de comercio de León sobre el impacto que tendrá el polígono industrial de Villadangos en la N-120 reveló que el polígono cargaría 50.000 vehículos extra a la N-120 y 15.000 a la AP-71, haciendo que la N-120 alcance un estado de congestión total en un plazo de 5 años (antes de alcanzar el máximo de 50.000 vehículos más). Exageradas o no las cifras, lo que es evidente es que el desarrollo pleno del polígono de Villadangos colapsará la N-120 hasta un punto que estrangulará literalmente el desarrollo industrial futuro de León. De momento sabemos que Mercadona generará un tráfico de 1.500 camiones al día. Conjuntamente a esto, el Centro de Transportes Integral de León (CETILE) cuenta con un "espectacular" acceso que ilustra todavía mejor lo bien que se hacen las cosas por estas tierras.

Desarrollo del área del Cetile y Villadangos con el acceso al Cetile planeado por la Junta y nunca realizado. Fuente: El Mundo; click para ampliar.

Es evidente que hace falta que se ponga en marcha YA el acceso al Cetile y Villadangos a la N-120 y AP-71 y que se liberalice el tramo León-Villadangos de la AP-71 con algún convenio que convierta en tramo en uno de peaje en la sombra. Pocas esperanzas hay de que se haga dada la política de la Junta en esta zona y su escasa o nula visión. Sin embargo, esta misma Junta que mantiene accesos tercermundistas a un centro logístico con una capacidad de desarrollo inmensa pretende que Villadangos se duplique a medio plazo sin ofrecer soluciones viables al tráfico y abocando con claridad al fracaso dicha ampliación y poniendo en serios apuros a las empresas presentes en este emergente área industrial, estratégicamente situada pero penosamente conectada.

Acceso al Cetile. No, no es una broma. Fuente: Google, click para ampliar.