domingo, 14 de septiembre de 2008

La apertura de uno de los túneles de Pajares viene cargada de regalos

Recientemente el túnel este de la variante de Pajares, una de las obras de ingeniería más complejas de Europa ha sido finalizado. El acontecimiento sucedió a las once y media de la mañana, cuando un leonés de Toral de los Vados dio la orden a la tuneladora para que perforase la última cortina de roca que separaba León y Asturias. A partir de aquí, las reacciones fueron de felicidad generalizada y de quizás de demasiada euforia por parte de algún dirigente del otro lado del puerto de Pajares que anunció que la cordillera había sido sometida. Gracias a esta gran obra, León podrá mejorar sus comunicaciones con Asturias y potenciará su condición de puerta del principado asturiano, algo básico para cumplir el deseo de la ciudad de consolidarse como centro del Noroeste.

Croquis de la Variante de Pajares, donde también aparece la línea tradicional. Fuente: Ministerio de Fomento, click para ampliar.

La apertura de el túnel este vino acompañada de la inauguración de una parte esencial para el soterramiento del tren en la ciudad de León; el enlace sur, que a partir de ahora permitirá que los convoyes de mercancías eviten la ciudad descargando así de tráfico a las vías que discurren por el centro de la ciudad, poniendo las bases para el soterramiento, con la eliminación del paso a nivel del Crucero. Finalmente, después de todo el trajín de las inauguraciones Zapatero ha anunciado que Ponferrada, la segunda ciudad de la provincia contará con una lanzadera para unirla con León y que de esta forma los ponferradinos puedan usar la conexión a Madrid en León de una forma competitiva mientras se avanza en la creación del itinerario de alta velocidad León-Ponferrada-Monforte.

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