Hace tiempo que llevo pensando en hacer una pequeña recopilación de los proyectos de todo tipo que previsiblemente se desarrollaran en el futuro en nuestra provincia y finalmente me he decidido a hacer una pequeña serie donde recogeré lo que podría ser de las ciudades y pueblos de nuestra provincia en el futuro. En este primer artículo sobre el tema, intentaré recopilar las actuaciones en materia de infraestructuras que nuestra provincia verá en el futuro, clasificándolas por existentes, desarrollos seguros, desarrollos posibles y propuestas.
Carreteras
Hace pocos años que nuestra provincia era un desierto de vías de alta capacidad donde lo único realmente interesante era la conexión de peaje con Asturias. Pero de unos años para acá la provincia ha generado una red nada desdeñable de vías de alta capacidad y ahora cuenta no solo con la AP-66 sino también con la A-6, que da una salida a vías de alta capacidad a Ponferrada, Astorga y La Bañeza, la A-231, que da salida a la autovía a una de las comarcas más pobres de la provincia como es la de Sahagún y que se ha convertido en un itinerario preferente para el transporte de mercancías, la AP-71, que comunica León con Astorga y forma parte de ese itinerario del que también forma parte la A-231 y ya por último la A-66, prolongación de la AP-66 hacia Benavente.
En el futuro, la provincia seguirá tejiendo una red que se volverá mucho más densa y que será acorde a la posición de nuestra tierra como puerta del Noroeste. Así, se construirán con toda seguridad la Ponferrada-Ourense, que comunicará nuestra provincia con la zona de Vigo, la León-Valladolid, que conectará León con el poblado centro de la meseta y supondrá una vía alternativa al itinerario León-Madrid que ahora se realiza por la A-66/A-6. Otra vía segura será la León-La Robla-La Magdalena, que supondrá un itinerario alternativo libre de peaje al trayecto hasta la Magdalena que permitirá ahorrar parte del precio actual del peaje. Además de estas habría que contar también con el Acceso Sur, parte del sistema de rondas y accesos de la ciudad de León.
Algo más en el aire están otras vías de vital importancia también como son la León-Bragança, que supondrá situar a León como el centro indiscutible del Noroeste, la Ponferrada-Villablino-La Espina que tendrá como función conectar la hoya berciana con Asturias y dar salida a la red de alta capacidad a la necesitada Villablino. La Ronda Noroeste se encuentra también en esta clasificación, ya que se encuentra en estudio y varias de las trabas que la paralizaban ya no existen; serviría para decongestionar definitivamente la ciudad y conectar los pueblos del alfoz al norte de la ciudad eficazmente. Ya por último en esta clasificación encontramos la vía rápida Mansilla-Cistierna, vital para conectar la Montaña Oriental y frenar en la medida de lo posible su caída en picado.
Luego tenemos otras vías que no dejan de ser meras promesas políticas o reivindicaciones de las diversas comarcas que no han encontrado todavía un apoyo económico por parte de la administración estatal o autonómica. En esta clasificación tendríamos el desdoblamiento de la LE-420 desde la Bañeza hasta Rioseco de Tapia, itinerario que con una mínima inversión conseguiría captar gran parte del tráfico entre Asturias, Madrid y Portugal si se realizase conjuntamente a la León-Bragança. Tendríamos también la Palencia-Sahagún, que también con una inversión mínima potenciaría la conexión de León con Palencia y el eje Valladolid-Palencia-Burgos que hoy por hoy es el más dinámico de la meseta norte. El Eje Subcantábrico entraría también aquí, ya que cada día que pasa se hace más patente que al menos en su totalidad va a ser irrealizable; primero porque atravesar Babia va a ser imposible una vez declarado Parque Natural y segundo porque ya son muchos años prometiendo este eje y nada se ha hecho en las zonas en las que sería interesante su construcción, como la La Robla-Aguilar de Campoo, un tramo que en su camino entroncaría con tres vías de alta capacidad como la Mansilla-Cistierna, la Palencia-Guardo y la Autovía de la Meseta (A-67) que comunica Palencia y Valladolid con Cantabria. Ya por último, aquí también entrarían la Berlanga-Fresnedo y la Ponferrada-Bragança, que no dejan de ser simples promesas electorales o ocurrencias de partidos políticos muy minoritarios.
La posible red de autovías de nuestra provincia en el futuro. Elaboración propia, click para ampliar.
Ferrocarriles
Mapa de ferrocarriles de la provincia actualmente, en trazo grueso la doble vía y en trazo fino la vía única. Elaboración propia, click para ampliar.
En materia ferroviaria nuestra provincia, como el resto de España, no esta avanzando a la misma velocidad que Europa, dada que la apuesta actual es por el transporte por carretera. No obstante, la provincia aguarda la llegada del AVE con impaciencia que una vez acabado en toda la provincia conectará León con Madrid y Asturias a 350 y 250 km/h respectivamente y Ponferrada con Galicia, vía Monforte y León a 250 km/h.
Como seguras y a corto plazo tenemos la variante de Pajares, de ancho internacional y que permitirá el paso de convoyes de viajeros a velocidades punta de 350 km/h y la línea León-Venta de Baños, que nos conectará con Valladolid y con Madrid a una velocidad idéntica a la que permitirá la variante. Todo esto sin alterar el tráfico de mercancías, que en el futuro se desviará al completo por nuestra provincia al convertir el corredor de Zamora-Lubián en exclusivo para pasajeros. No obstante, queda por aclarar que ocurrirá con el tráfico de mercancías de Asturias, que se verá abocado a ir por la cuesta de Pajares hasta que se haga la migración a ancho internacional de toda la red, con la pérdida de competitividad que ello supone respecto a otras zonas como Galicia.
A largo plazo ya tenemos la tan necesaria conexión por alta velocidad con Ponferrada y A Coruña, vital para la vertebración de la provincia pero que a algunos políticos les parece poco importante. El trazado, al igual que los plazos de ejecución son un misterio que debería resolverse pronto. Además también tenemos la ansiada ruta de la plata, cuya vital importancia para el Noroeste no se ve correspondida por una voluntad política para reabrirla, ya sea por el itinerario actual o por el itinerario de la León-Benavente.
En otro nivel tendríamos los cambios que acontecerán en la línea de FEVE de nuestra provincia, con el soterramiento de las vías a su paso por la capital, la construcción de unos talleres en Cistierna y la posible recuperación de la línea ferroviara de Hulleras en el valle de Sabero para servicios regulares y sobre todo turísticos. De momento, estos ambiciosos proyectos se quedan en saber que grado de complicidad mostrará el leonés Angel Villalba con la tierra que le ha dado de comer desde que nació. Se queda también en el aire el futuro de la línea de MSP, el Ponfeblino, cuyo futuro parece ser meramente turístico y de mercancías.
0 comentarios:
Publicar un comentario